viernes, octubre 05, 2007

Feliz Día de la Medicina Peruana

C. es médico traumatólogo por vocación, ahora vive en la espesura de la selva de Madre de Dios, siempre tuvo y se mantiene en la idea de algún día colaborar en el deporte nacional.

J. es un médico al que el destino en forma de sorteo de SERUMS llevó a Chachapoyas, a una posta a la que hay que llegar en lancha, a dos días de la carretera mas cercana, y quiso ese mismo destino que ahora esa zona tenga un médico que se enamoró de ella y sea el promotor del desarrollo de la misma.

R. es madre y médico, vela por una familia y por la vida de cada uno de los pacientes mayores de 80 años que recibe a diario en sus consultas.

C es médico, biólogo y aventurero, una de esas aventuras justamente lo llevó a encontrarse con un hecho que a la larga, lo condujo a la mayor institución de enfermedades infecciosas en el mundo, desde donde sigue, desde su óptica tan particular, su trabajo y su labor.

J es pediatra, siempre quiso serlo, vive ahora entre sus dos pasiones, su familia y los niños, él tiene el suyo propio, es un padre orgulloso, un buen hijo y un gran amigo.

R quiso ser endocrinólogo desde que pateábamos la pelota y tomamos nuestras primeras cervezas hace 16 años, vive entre su familia con mis dos sobrinos putativos, la medicina, la Universidad, el Hospital, la Clínica y el eterno mundo que esta detrás de aquellas palabras en los textos, el de la búsqueda de un mejor trato para el paciente.

Todas estas personas tienen algo en común, un día hace 16 años vieron sus nombres en un anuncio pegado en las rejas de una Universidad, y desde aquel día en que se sentaron en el mismo salón de clases emprendieron un camino lleno de nuevas experiencias, muchas de ellas con mensajes inolvidables.

Como olvidar la primera vez que se entra a un Hospital con un mandil blanco, o el primer paciente en el curso de Semiología.

Como olvidar las muchas amanecidas alrededor de unas tazas de café y una pila de libros, las juer… perdón fiestas en la Universidad, el curso de medicina tropical en Iquitos.

Como olvidar el externado y el internado, cuando por primera vez eres tu y tu paciente, sin nota de por medio, son “cursos” donde la nota no vale, y donde la palabra “tigre” pasa de ser el nombre de cierto felino a ser el apelativo por el cual todo el mundo te conoce, mientras corres (ojo, corres) por una emergencia o el pasillo de un piso, con órdenes en un bolsillo, jeringas en el canguro, muestras de sangre en la mano izquierda y una bolsa de transfusión en la otra.

Desde aquel día en que todos vestidos con togas y birretes dijeron adiós a su vida de estudiantes, muchos tomaron caminos distintos, todos ellos enriquecedores, todos ellos pensando en continuar su viaje en aquel velero, empujado esta vez por los vientos de sus propios destinos…

Muchas veces nuestros caminos se entrelazaron y volvimos a vernos, incluso compartiendo el mismo lugar de trabajo y la misma vereda en algunas ocasiones, y a pesar del tiempo, siempre los lazos de amistad y de cariño por lo que hacemos permanecieron intactos…

En este sendero que sigue y sigue, encontramos a muchas otras personas que comparten nuestros ideales y la misma pasión por lo que hacemos, incluso en lugares insospechados, como los blogs.

Después de 16 años de haber pisado por primera vez aquel lugar donde aprendí no solo de medicina sino de la vida misma, simplemente puedo decir que es maravilloso seguir sintiendo lo mismo cada vez que lo recuerdo, y saber que, después de todo este tiempo aun perseguimos los mismos ideales con la misma mirada de optimismo que atisba en cada uno de aquellos que deciden llevar este camino.

En este día quisiera enviarles a todos ustedes un abrazo muy grande, mis amigos y compañeros de ayer, de hoy y de siempre, a todos aquellos a quienes conocí en mi corto peregrinar a través de los lugares donde estuve en nuestro vasto Perú, y a todos aquellos jóvenes que viven el día a día con las esperanzas de sus pacientes en las manos, y las suyas propias en sus corazones.

Un abrazo por compartir esta profesión, que más que un oficio o una carrera, es una forma de vida…

FELIZ DIA DE LA MEDICINA PERUANA.

martes, setiembre 04, 2007

Barreras

Ejercer la medicina en un país como éste tiene varios requisitos, uno de ellos es obviamente un dominio perfecto del idioma, algo que muy pocas personas logran, ya que se requieren años de estudio para hacerlo, y hay que viajar hasta aquí para lograr un perfeccionamiento del mismo.

No solo eso, además hay que pasar un examen que según mis compañeros de laboratorio tiene un grado de dificultad relativamente alto.

En ese sentido, los médicos que venimos a hacer Cursos de Postgrado, llámese solo investigación por un tiempo corto o un PhD de 4 años, como en mi caso, no podemos trabajar individualmente como médicos y para ver pacientes tenemos que ganarnos la confianza de nuestros profesores y compañeros y luego de eso podremos, en la medida de lo posible acudir a Rondas, e incluso colaborar en procedimientos; al estar en un Hospital Universitario, si bien no ejercemos legalmente la medicina podemos participar académicamente en una discusión que traerá un beneficio al paciente.

Así se han desarrollado estos dos años de estudios, la mayor parte del tiempo en el laboratorio y algunas horas a la semana viendo pacientes en la Unidad de Cardio del Hospital Universitario, uno de los más grandes e importantes del País, y uno de los tres centros de referencia para transplante cardiaco en todo Japón.

Por ser un centro sumamente especializado, los pacientes que llegan son de alta complejidad, y por supuesto los instrumentos que se utilizan muestran la tecnología de punta característica de la industria japonesa.

Obviamente la calidad de manejo es excelente por justamente estas ventajas… cuando el paciente es japonés.

El señor K, un paciente de 58 años, natural de otro país asiático y profesor universitario, sufrió hace 3 años un infarto masivo que lo dejó con una insuficiencia cardiaca severa, candidato indudable a transplante que no ha podido encontrar donante, no quedando otra opción que colocarle un dispositivo de asistencia ventricular, una bomba artificial que hace las veces del músculo cardiaco, permaneciendo con ella hasta hace 3 meses cuando decide volver a su país, para ello, solicita el retiro de la bomba.

De eso hace tres meses, el paciente sin embargo estuvo en cuidados intensivos por 2 largos meses y medio, sedado y en ventilación mecánica, por lo complicado de su situación luego de la extracción del dispositivo.

Hace dos semanas se decide despertar al paciente de su sedación, sin embargo sus parámetros respiratorios no mejoran, y se agota con mucha facilidad incluso ahora, 2 semanas después de haberlo despertado.

Los médicos hacen denodados esfuerzos por mejorar sus parámetros pero simplemente el problema persiste.

Y aquí viene un punto importante… el paciente no habla japonés, y los médicos que lo ven diariamente no tienen un inglés fluido, y ni hablar de su idioma nativo.

Uno de mis profesores me comenta el caso y me pregunta si puedo ayudarlos con el idioma, aunque no estoy muy seguro de que es lo que voy a hacer, nada se pierde intentando y los acompaño a ver al paciente

Lo primero, lo saludo y me presento, el esta aun en ventilación asistida, usa un tubo de traqueotomía (un orificio en la tráquea para colocar el tubo de entrada de aire del ventilador) sin embargo, puede respirar a voluntad, el problema es que lo hace muy rápido y esa es la razón por la cual se agota y en horas posteriores necesita el apoyo de la maquina.

Le explico lo que sucede en sus pulmones, como esta el oxígeno, y que es lo que los médicos de planta están intentando hacer, y que es lo que tiene que hacer él para ayudarlos a mejorar su cuadro.

He contemplado muchas miradas en esta carrera, de agradecimiento, de desesperanza, de angustia, dolor y resignación, pero puedo asegurar que pocas como la de este hombre, cuando entre al cuarto el dolor que se notaba en sus ojos era más que evidente, los dos residentes a su lado eran dos postes a los que no les prestaba la mas mínima atención, cuando empecé a hablarle primero se sorprendió, y luego poco a poco con las palabras comenzó a examinar su propia habitación, y había asentimientos de cabeza señal que entendía perfectamente la situación.

Un breve examen, usando el estetoscopio (uno de los mejores tratamientos para la ansiedad dicho sea de paso) hizo lo que no se pudo hacer en estas semanas, bajó su frecuencia respiratoria, manejó mejor sus secreciones, y por lo menos dejó mejor encaminada la rehabilitación que había de realizarse en él.

Acá otro punto aparte, en ese momento me percaté de algo raro, el único que tenia estetoscopio era mi profesor, los residentes simplemente estaban observando, por eso les llamó tanto la atención que yo tome el estetoscopio y revise al paciente mientras le hablaba (los vi por el rabillo del ojo que se miraban entre ellos). Los residentes si bien tocan pacientes (no muy frecuentemente) no pueden tomar decisiones.

Mientras en el Perú el residente es el amo y señor del Hospital, aquí ocurre todo lo contrario, no pueden mandarse solos.

Luego de despedirme, conversamos con mi profesor acerca de las alternativas de tratamiento del paciente, las cuales desafortunadamente no son muchas, y su pronóstico es muy malo.

Hoy fui a ver al señor K, sigue conectado al ventilador, pero respira mucho mejor, esta mas confiado y hace menos movimientos bruscos en pro de guardar energías para su rehabilitación respiratoria y cardiaca. Está mucho mas tranquilo, agradeciendo a todos, y mas a los jóvenes residentes que están a su lado, al menos ya los mira y les hace señas.

En el caso del Señor K, la barrera del idioma fue mas tangible que nunca, casos como él aunque en mucho menor grado de complejidad los hay por montones en estas islas, casos en los que no solo existe la barrera del idioma sino también la cultural (aquí la opinión del medico es incuestionable), que hacen que muchas veces el paciente extranjero mantenga esa desazón de quien se siente en desventaja con respecto a otras personas que pueden comunicarse sin dificultades, por tal motivo talvez encontrarse con un médico extranjero fue para este señor un motivo de tranquilidad ya que hubo quien le pueda explicar punto por punto su problema y como debe comportarse para colaborar en su tratamiento, y eso lo ayudó a relacionarse mejor con su entorno, y con quienes lo ven directamente.

Por otro lado, ejercer la medicina en este país supongo que es, para un extranjero, una experiencia mas que interesante, enriquecedora y gratificante como en todos lados pero al mismo tiempo un desafío en el sentido que implica la interacción de dos culturas, y a un nivel tan íntimo como es la relación medico paciente.

Cada día que pasa veo que tenemos diferentes maneras de ver la medicina, supongo que para ellos lo mío puede ser una pérdida de tiempo y hasta algo obsoleto, así como para mi me parece ilógico tener a 2 médicos para limpiar secreciones cuando podrían estar manejando otros pacientes.

Sin embargo, ya sea con un estetoscopio en la mano o con la mejor metodología de monitoreo invasivo, la finalidad es la misma, el beneficio del paciente y dar lo mejor de uno para que al final del camino, podamos llegar a un buen término o sentir que se hizo hasta lo imposible por ellos.

Como todo en esta vida existen a lo largo del camino barreras que lo dividen, sin embargo estas barreras dejan de ser infranqueables cuando existen personas que saben que el destino de aquellos caminos separados es finalmente el mismo.

Lo más importante es que hasta ahora, felizmente, tanto la mayoría de los médicos peruanos que conozco de toda la vida, como la de los japoneses que he conocido en este corto tiempo, están conscientes de ello.

Ese tipo de sensaciones te reconforta y permite que sigas dando lo mejor de ti en cada paso hacia adelante, el querer seguir formando parte de aquel enorme universo es un estímulo mas que suficiente, da que pensar que incluso al otro lado del mundo, otro médico que fue educado de una manera diametralmente opuesta a la nuestra sin embargo siente la misma sensación de satisfacción cuando un paciente sin voz mueve los labios para decir un gracias, y mucho mas aun al notarse un repentino cambio en esos ojos que ahora pueden descansar mas tranquilos, sabiendo que aunque haya diferencias en el idioma y la cultura, esos jóvenes de blanco están luchando dándole lo mejor que tienen.

Y no me refiero a la tecnología, que ayuda pero no alcanza; sino a un bien mucho mas preciado, ellos mismos.

viernes, agosto 17, 2007

Estamos con ustedes

Es la segunda vez en el año que escribo de movimientos sísmicos, pero esta vez no le tocó a estas tierras de Oriente, sino a mi propio país y a mi ciudad.
Para una ciudad con la población que tiene Lima, que un sismo de 7.9 grados no haya dejado víctimas ni daños espectaculares, es realmente una bendición, y que se haya desarrollado en momentos en que la gente estaba de salida de los trabajos también. Creo que todos los que tenemos familiares allá sabemos la angustia que se siente al no tener idea de lo que pudo haber pasado, hasta que llega el mensaje (a mi me llegó un correo de mi padre, diciéndome que todos en casa estaban bien, ya que el teléfono no funcionaba pero si la red, raro, no?)
Sin embargo, otra fué la escena en el sur de Lima, una zona tan golpeada por los terremotos desde aquel de Nazca, esta vez Pisco sufrió daños lamentables y pérdidas irreparables.
Un abrazo para todos aquellas personas que estan pasando por momentos tan difíciles y para todo el Perú, esta es una oportunidad más para demostrar de qué está hecha su gente.

lunes, agosto 13, 2007

Navegar sin cartas

Lima, Marzo del 2003…
Suena el teléfono en la Unidad de Cuidados Intensivos, estamos el R2 (un muy buen amigo mío), la enfermera y yo (en mis tiempos de R1 y ultima rueda del coche), el R2 contesta…conversa un segundo y cuelga…
-Nam, hay un paciente abajo, lo acaban de traer de provincia-
-¿Qué es?- Respondo con un reflejo, sin quitar la mirada de la Historia Clínica que estoy terminando, un paciente con una hepatitis fulminante complicada con trastornos de la coagulación (en otras palabras, esta sangrando por todos lados).
-Es una intoxicación por paraquat- Mi R2 responde, levanto la cabeza para preguntarle que es eso, el está tan confundido como yo, los dos no tenemos ni idea.
Acto reflejo…al mataburro, nada en el Harrison (la Biblia de la Medicina Interna), nada en el Washington (el mataburro por excelencia, te saca del apuro mas bravo en el momento mas oportuno), nada en los libritos esotéricos que están en la Minibiblioteca de la Unidad de Cuidados Intensivos, salgo corriendo a pedirle la computadora prestada a la secretaria del Departamento de Medicina…entro a Internet… y busco la condenada palabrita…Paraquat.
Entramos a la base de datos de Pubmed, la Biblioteca de Medicina más grande del mundo, para enterarnos que hay como 100 artículos al respecto (en ese entonces, ahora la cantidad se ha multiplicado por 10 aproximadamente), de los cuales unos cuantos son reportes de casos, y solo teníamos acceso libre en ese momento a 2 de ellos.
Imprimimos los artículos y bajamos a la Emergencia.
En las escaleras vamos revisando…herbicida…compromiso respiratorio, hepático y renal…, como con todos los pacientes que ingieren este tipo de tóxicos, el tratamiento es de soporte basico de la vida y algunas otras medidas no estandarizadas mientras se va recuperando, si es que lo hace, la esperanza es casi nula -está hecho- con esta premisa bajamos para ver a nuestro paciente.
Encontramos a medio mundo arremolinado en la Unidad de Shock y Trauma, los nefrólogos trabajando en la hemofiltración que estaban realizándole al paciente, los residentes de emergencia corriendo con las órdenes de laboratorio y 10 sapos de esos que nunca faltan que están rondando en la emergencia.
El paciente viene de un poblado en el Norte del País, trabaja como agricultor y en las ultimas semanas estuvo fumigando unas chacras…y esta semana comenzó a tener dolor abdominal, nauseas, vómitos y los últimos días dificultad para respirar.
-En el Norte, fumigando…- y recordando el calido norte peruano, vino la siguiente conclusión –este paciente ha fumigado solo con un short, el tóxico ha ingresado por la piel y las vías respiratorias, no lo ha ingerido, por eso todavía esta vivo-
Las nauseas, los vómitos y el dolor eran tanto por la intoxicación como por la insuficiencia renal que estaba comenzando a padecer, y el compromiso respiratorio se hacia cada vez mas evidente.
-Nam, hay que subirlo- Me dice el asistente, sedamos e intubamos al paciente y lo pasamos a ventilación mecánica, sigue en terapia de hemodiálisis por tiempo indefinido, hasta que mejoren sus constantes o se terminen de caer.
Hizo Síndrome de Dificultad Respiratoria del Adulto, una condición con un altísimo índice de mortalidad (80%), continuó con Insuficiencia Renal Aguda por un tiempo largo, desarrollo arritmias ventriculares (alteraciones del ritmo cardiaco), y además se complico con una neumonía asociada a ventilación mecánica.
Un mes duro mi rotación, el paciente permaneció en UCI un tiempo mas, saliendo a piso luego de casi 3 meses en la Unidad.
No recuerdo su nombre, aunque recuerdo que era poco común, lo que si recuerdo era su rostro previo al momento de intubarlo, un paciente que estaba prácticamente perdido, dándose cuenta de la gravedad de su situación, y su rostro cuando salió de la Unidad a Piso de Hospitalización, con una pérdida de mas de 40 kilos, pero vivo, y valiéndose por si mismo para las necesidades básicas, 3 meses después.
Recuerdo las muchas discusiones académicas que se hicieron del caso, y los cientos de comentarios de genios que hablaban después que todo había pasado pero que misteriosamente al momento en que las papas quemaban no estaban, o si estuvieron pero simplemente estaban callados viendo como nos las arreglábamos.
Y también recuerdo las discusiones al pie del paciente, las que van en serio, en las que si te equivocas, en un rato llamas al camillero para que venga con una bolsita negra, si alguna vez creí que había aprendido a manejar un ventilador mecánico antes de este paciente, con él me bajaron los humos de un sopapo, los parámetros salían de lo que hay en los libros, había que revisar las curvas una y otra vez, tomar gases arteriales constantemente, y el manejo del medio interno era otro dolor de cabeza.
Cuando acabé la rotación, el Jefe de la Unidad me dijo –Bueno, supongo que te iras contento, has aprendido mas UCI de lo que muchos R2 hubieran querido, no te puedes quejar-
En serio no me puedo quejar, esa rotación de R1 fue bastante entretenida, hubo bastante trabajo, sobre todo de equipo, y si hubo un paciente que recuerdo de aquella rotación entre todos, es justamente este joven agricultor, de quien puedo decir que tuvo la suerte o la iluminación de alguien superior en llegar a tiempo y que las medidas que se tomaron sean las adecuadas, para que todo llegue a un buen término.
El tratamiento y su hospitalización duraron algún tiempo más, hasta que pudo volver a casa, y volvía cada cierto tiempo a sus controles aprovechando para saludarnos.
Cada paciente es un mundo, no está en un libro, ni en la ultima edición del New England Journal of Medicine, casos como este nos dejan la clara intención que debemos recordar que nunca dejamos de aprender, y que la humildad de un sencillo conocimiento hace que el hambre de experiencia sea mayor cada día, se lo debemos a nuestros pacientes.
Sir William Osler dijo una vez

To study the phenomenon of disease without books is to sail an uncharted sea, while to study books without patients is not to go to sea at all.

Nada más cerca de la verdad.

lunes, julio 30, 2007

Feliz Primer Año, Blog


Inicié, como muchas cosas que suceden en esta vida, la lectura de los blogs por casualidad, era Octubre o Noviembre del 2005, yo apenas había llegado a estas tierras de Oriente y usaba la computadora del laboratorio, ya que no tenía aun la mía, y buscando imágenes del Perú por Internet para mostrárselas a la gente del lab, me encontré con Perú blogs, y el primer blog que leí fue el de Beatriz Neumann, la vida normal de una chica en sus jóvenes 20 años, en sus propias palabras, muy pronto comencé a ver que había algo mas, que había gente que aparte de leerla escribía comentarios acerca de experiencias parecidas, a veces críticas, a veces palabras de aliento, es así como llegue a leer un extinto blog de una chica como ella decía Linda y pechocha, al blog de un mutante, a un muchacho de pelo largo y lentes amarillos en un blog verde pacazo y a un atleta que por esos tiempos tenia un avatar bastante llamativo en su tan recordado caballo negro.
Solo un par de meses después una chica mas peruana que la papa a la huancaína comenzó a escribir sus historias en un país diferente, mostrándonos una parte de Chile que, al menos yo, no conocía; de pronto, una poetisa con alma de médico apareció en mi pantalla, y tampoco pude evitar quedarme pegado a cada relato y a cada post.
Relatos de personas que podrían ser la de mi vecino, o la señora que esta comprando pan en la esquina, o aquella chica en bicicleta, tan exquisita y auténticamente narrados que no despiertan otra cosa sino el afán de continuar leyéndolos, no solo por curiosidad, sino porque sientes que al hacerlo alimentas tu ser con nuevas experiencias, intentando asimilarlas y hacerlas tuyas, como es muchas veces la intención de quien las escribe.
Es así que hace casi un año, luego de meditarlo frente a mi pantalla, inicié este blog saludando a mi País, mirando hacia el sur y al este, a través de un inmenso océano que sin embargo es pequeño comparado con el sentimiento que despierta en cualquier peruano lejos de la familia, los amigos y el ritmo de vida al que estamos acostumbrados.
En este ano pasaron muchas cosas en este blog, aprendí a colocar un header, a hacer un botón, poco a poco aprendí a escribir en un punto medio entre lo que era para mi y lo que era para los lectores, y traté, y sigo tratando de hacerlo desde la perspectiva de alguien que esta al otro lado del escritorio.
Y a través de este blog conocí gente increíble, que pasaron de ser páginas web que leía casi a diario a personas con las que hemos tenido amenas charlas, y de quienes aprendí mucho, y me hicieron recordar que hay vida mas allá de las puertas de un Hospital y una Emergencia.
Gente como Alfredo, que en cada post me ha hecho desarrollar el arte de reír a carcajadas sin hacer bulla (sabes que te leo en el laboratorio), y que incluso antes de saber que era el mismo que salta mas de 2 metros me daba una razón mas para decir que en el Perú sobra talento, o la Truly, que en cada post y conversación sale con unas ocurrencias dignas de un bestseller; el dragón y su inacabable chispa, donde con un hecho cotidiano te puedes partir de risa, Ursula, Gigi, Allan, Danza, la Hammer, la Tia Lauris, Ana Lucia, Maria Elena, Chien y todos aquellos quienes están en la barra lateral de mis links, y acaso algún otro mas que también leo, pero lamentablemente hasta ahora no he tenido el gusto de comentar en su blog o de tenerlo en el mío.
Un año desde que inicié esta aventura, un año bien invertido y con balance positivo en amistades, en experiencia y en enriquecerte de aquella rara virtud que es la calidez que puede brindar un ser humano a través de sus palabras.

Gracias a todos por pasar por aquí, Feliz Cumpleaños Blog, y Feliz Cumpleaños Perú.

viernes, julio 13, 2007

Dias de lluvia

Para quienes conocen la Selva Central, saben que la geografía es bastante particular, el cálido clima alberga unos paisajes conformados por quebradas y montes cubiertos de densa vegetación, en medio de los cuales existen comunidades nativas (generalmente de origen ashaninka) y comunidades de “colonos” llamados así por ser personas originalmente de la sierra que habitan estas zonas por estaciones de acuerdo a las temporadas agrícolas y que han “colonizado” gran parte de la región.
Corría el verano del 2000, medico serumista en la siempre llamativa y variopinta ceja de la Selva Central en nuestro Perú, en esta oportunidad, había llegado una fecha para vacunar madres gestantes en la localidad bajo nuestra jurisdicción.
Ese día, muy temprano, la enfermera y yo tomamos los termos con las vacunas y nos fuimos en busca de algunas madres que no habían acudido a la campaña general la semana previa en la Posta.
Como era de esperarse, estas señoras vivían en sitios un poco retirados de nuestro centro de labores, y lo que es peor, en sitios a los que no hay acceso en cualquier transporte motorizado.
A poco de emprender la partida, unas nubes cubrieron el azul firmamento y una fina lluvia inicio su suave compañía, sin embargo, dado que no es Lima, donde la garúa queda ahí nomás, se inicio un aguacero de aquellos… por suerte fuimos precavidos y habíamos llevado nuestros chalecos, el mío era un chaleco verde caqui (después me dijeron que cambie de chaleco porque podía ser confundido con alguna fuerza del orden… pero esa es otra historia) y tenia mis botas de lluvia, así que seguimos caminando.
Para quienes no saben que tipo de textura tiene el terreno, es de arcilla roja, sumamente resbalosa, en un terreno cuyos caminos de tierra afirmada generalmente están al borde de las quebradas, y donde la vegetación en estos meses de lluvia es interrumpida ocasionalmente por derrumbes de lodo producto de la misma. Manejar un auto aquí es exponerse a un accidente o a quedarse atascado, lo que ocurra primero, y una moto es una completa imprudencia, por mencionar algo suave (lo hice una vez, alguien arriba me debe querer mucho, o de repente todavía no me quieren por allá abajo)
Al mediodía la lluvia amainó, y ya estábamos subiendo una pendiente, con mucho cuidado y pisada firme llegamos a la casa de la primera gestante, que nos recibió de muy mala gana mientras estaba pelando su café… No se quiso vacunar hasta que después de cien intentos aceptó, bajo promesa que se le iba a incluir en un programa de reparto de alimentos. Aun así mascullaba cosas en quechua de las que la enfermera me dijo que no eran muy santas…
Luego de tomarnos el doble del tiempo en bajar la pendiente (mayor de 45 grados), nos encaminamos a la segunda casa, esta vez el sol estaba sobre nosotros, los chalecos estaban en las mochilas y las botas de jebe estaban haciendo efecto de sauna en mis pies, al llegar luego de un par de horas, un cerco nos recibió en la entrada, y se veía una casa a lo lejos, pero no se podía entrar, la enfermera llamo a la dueña de casa, quien se asomó, era la gestante que veníamos a ver, ella al notar nuestra presencia le pasó la voz a alguien que estaba en una parte de la casa que no podíamos ver desde donde estábamos, segundos después, tres canes grandes y furiosos salían disparados hacia el cerco…
Nos había soltado los perros…
La enfermera me dijo que corra mientras ella ya lo estaba haciendo, pero yo ya estaba cansado, harto de la lluvia, del sol, con sueño y con hambre y de la actitud de la primera señora y de esta segunda, así que no sé si fue arrebato, estupidez o una combinación de ambas, pero cuando ví que los perros venían y la mujer ahí parada mirando a lo lejos, me llegó tanto que saqué el machete que tenía para abrir trochas y los esperé con el machete en la mano…al menos para asustarlos.
La señora pegó un grito y los perros se alejaron…
Si hay algo que la gente en esas zonas quiere, es a sus perros, mas que a la familia creo yo, aunque si matas a un perro, estas hecho.
La señora se acerco, haciéndose la que no se había dado cuenta, se disculpó por sus perros (si, como no) conocía a la enfermera, nos escuchó y luego tampoco se quiso vacunar, hasta que nuevamente a puro floro (al mejor estilo de Gabriel) aceptó finalmente.
La ultima no vivía lejos de ahí, pero había que atravesar una chacra de naranjas (me comí como 6, no mas porque sino te da una diarrea de aquellas), y escapar de una vaca que se computaba perro de chacra, al llegar a la casa felizmente esta señora no puso objeciones para la vacunación, e incluso nos obsequió un poco de fruta para el camino de vuelta…
El camino de vuelta fue mas tranquilo, estábamos cerca de la carretera y de un anexo cercano donde teníamos una posta periférica, la técnica de la Posta nos recibió y finalmente almorzamos cuy en una casa donde la dueña vende comida, y volvimos a nuestra Posta casi al llegar la noche.
He recordado este episodio ahora al ver la lluvia a través de la ventana aquí en el laboratorio, casi 7 años después y a miles de kilómetros de un lugar que me enseñó muchas cosas, cosas que no están en los libros y que no encuentras en ninguna Universidad en el mundo, cosas que no te da un doctorado o un titulo en lo que hagas…
De todo ha de aprenderse en esta vida, dice mi tío, y yo le doy la razón...
Una vez mas, hacer Medicina en el Perú no es fácil, ni siquiera sé si podría llamarle difícil…

Aunque de algo estoy seguro… es una experiencia de vida.

viernes, julio 06, 2007

Un respiro

Mientras escribo esto estoy en la laptop del laboratorio pensando en las próximas 8 horas que me quedan para acabar la labor del día de hoy, y es que desde hace unos meses parece que todos aquí se hubieran puesto de acuerdo para pedirme cosas y resultados diferentes.
Lo bueno… ya tengo tres publicaciones en Medline, al menos mi nombre no es tan anónimo en la comunidad médica internacional.
Lo malo… mi cama cree que soy un visitante ocasional, ya que habitualmente mi almohada es mi teclado, y la cama ha sido suplantada por la silla del escritorio… Y si llego a la cama, seguramente dos veces a la semana duermo en la posición que Dios manda, es decir, con la cabeza en la cabecera y los pies en la parte de abajo, habitualmente despierto en diagonal, o perpendicular al eje longitudinal de la cama.
Lo feo, ya no puedo hacer más cosas que dedicarme a los experimentos, y eso incluye entre otras cosas los blogs, esto es, no tengo tiempo para pensar en un post pero a menudo los leo, al menos a la mayoría.
Se que Alfredo sigue componiendo canciones pastrulas, que el Dragón luego de una fugaz incursión en la pantalla grande se fue a la espléndida Cajamarca y no quería regresar, que Ana Lucia se encontró con una abuelita de la Gestapo, que Maria Elena se fue a España de paseo y se queseó con una laberintitis, que Elizabeth esta queseada con el MIR, que Danza estuvo happy todos estos días que Osamu estuvo por Lima, que Gigi esta tomándose un descanso con el naranjo, que Ursula se fue por Brasil y regresó con un bichito en el avión, la Tia lauris sigue en Buenos Aires desprendiendo halagos por las calles y Chalo estuvo también por esos lares platenses, que Allan se gano un premio blogueril, que la Hammer escribe ocasionalmente y que ha vuelto al mundo que la envuelve ahora y que estuvo esperando por ella; y sé que la Truly ya está mas tranquila después de los momentos difíciles que paso.
Mmmm… Después de todo creo que no me había ido, solo que era como el invitado de la fiesta que toma un descanso en la reunión y permanece en silencio, mientras observa como todos se divierten, y el también disfruta de ello.
Este blog no estuvo cerrado, solo se tomó un descanso en plena fiesta.
Ya vendrán nuevamente esos posts donde como dice el atleta “no hay palo en que ahorcarse”.

Bueno, me llaman, a seguir con la chamba…

* Texto editado a las 4:30 de la mañana del día siguiente, antes de la ducha para salir disparado hacia un nuevo dia en Japón.

miércoles, junio 06, 2007

Detras de las paredes

Muchas veces he escuchado y leído comentarios acerca de la “Deshumanización” de la medicina, y de la falta de “humanidad” del médico con sus pacientes.
No puedo negar que he conocido personas que tienen numero de colegio médico pero que no entran en la categoría de de comportarse como tales, no por sus conocimientos (aunque algunas veces ignorancia y delincuencia van juntas) sino por la actitud que tienen en ciertas situaciones que hacen que se nos califique a todos en ese rango.
Pues bien, la verdad, no me gusta hablar de ese punto, así que mas bien me voy a ir al otro lado, un lado que quizá mucha gente que esta fuera de un ambiente hospitalario desconoce, y ese lado esta relacionado con la labor extramédica de los médicos y los estudiantes de medicina de los Hospitales en el Perú.
Un día Lunes cualquiera en la mañana, todos corriendo de un lado a otro, y se aparece el R2 de UCI con un rollo de monedas en la mano, como cobrador de micro diciendo, -2 lucas, 2 lucas- lo miramos en medio de la emergencia y nos dice que es para la albúmina de su paciente que ya se acaba, y no hay mas, no hay familia como siempre. Hay gente que le da, hay quienes le dan un sol, y él sigue con su búsqueda hasta completar lo que le falta para comprar la albúmina.
Un día de semana cualquiera, mi externa, la de la paracentesis (Que ahora esta haciendo medicina interna en Houston), abre su casillero y se da cuenta que ya se le acabaron los catéteres venosos centrales, tenemos un paciente que requiere monitoreo invasivo y no tiene un cobre como siempre, agarra una bolsita, nos pide una colaboración y se va en busca de los demás externos e internos para asaltarlos.
Esto sucede siempre y cuando lo que necesitan no esta en los canguros y en los casilleros, pero, ¿de donde creen que salen las cosas?
El sistema de stock que siempre han tenido los estudiantes de medicina en los Hospitales se resume en “agarra todo lo que haya y economiza porque te va a faltar”, y es así como en la emergencia uno pide tres cloruros de sodio para endovenoso, el paciente mejora con dos y al irse a su casa se olvida del otro, eso pasa a engrosar el stock de la emergencia. Para quienes vivían pensando que los Hospitales tienen medicinas para emergencias les cuento algo, las cosas que le ponen al paciente grave que llega a emergencia no son del Hospital, son de pacientes que se fueron de alta o fallecieron y que nunca se usaron, la enfermera las tomó y las guardo para que sirvan para alguien más, o el externo o el interno le ganaron y lo tienen en el casillero a espera de necesitarlo, el instrumental es del Hospital, no las medicinas.
Ver al R2 de UCI, a mi externa, o a los internos de emergencia en estas lides son cosas de todos los días en un Hospital del Estado, es más, si a un externo le preguntan cuanto tiempo al día efectivo pasa “consiguiendo” cosas para sus pacientes y cuanto realmente dedicándole a su educación y formación, y obviamente al cuidado del paciente, la respuesta es escalofriante, lo mismo ocurre con el interno, y en menor medida con el residente.
Sin embargo, estos jóvenes deben tener las respuestas en la boca cuando pasa la ronda y tienen que contestar todas las preguntas acerca de las 10 causas del síntoma de su paciente, y de los criterios diagnósticos de la enfermedad que podría tener este otro, acaban el trabajo a las 10 u 11 de la noche y tienen que volver a las 7 de la mañana del día siguiente para comenzar de nuevo, por supuesto habiendo estudiado para la exposición que tienen en la tarde.
Supongo que es por eso que quienes salen tienen otra visión y las cosas se les hacen mas sencillas, en el Perú se hace medicina de la manera más difícil, y a pesar de eso no se hace mal.
Y no solamente se hacen “chanchas”, o se maneja un stock, hay incluso otras cosas que hacen que esta labor sea aun mas anecdótica, uno de mis R1, cuando yo era R3, al ver que uno de nuestros pacientes fue abandonado por la familia, y no había recursos para nada, organizó UNA POLLADA, hizo el trato con una señora y se organizó la pollada, todos colaboramos y se obtuvo dinero suficiente para que se pudieran hacer mas exámenes y llegar al diagnostico del paciente, y sobró para el tratamiento.
Historias como estas hay a pastos, recuerdo siendo interno aquella vez que me fui por mi cuenta de Hospital en Hospital buscando en cada Banco de sangre unos paquetes de crioprecipitado para un niño, o como cuando mi amigo R se fue hasta neoplásicas para gestionar el mismo la plasmaféresis de su paciente con Guillain Barre.
Muchas veces me han sabido decir en mi cara que somos unos insensibles, refiriéndose a los médicos, incluso familiares míos me lo han dicho, e indignados hasta creo que me han reclamado el porque de la “inhumana” actitud de los médicos frente a sus pacientes.
Antes, lo confieso, me reventaba, intentaba dar explicaciones de cosas que no tengo porqué explicar, ya que desde mi punto de vista no existía tal falta.
Con el tiempo entendí qué era a lo que se referían, a veces intento explicar pausadamente que hay que ver con la luz del día para darse cuenta que no todos los gatos son pardos, a veces trato de mencionar cosas como las de arriba, aunque siendo sincero, casi siempre es inútil, quien piensa así seguirá haciéndolo hasta que un hecho puntual reafirme su convicción o lo haga cambiar diametralmente de opinión.
Mientras tanto, yo sigo pensando que a pesar de los problemas y la falta de dinero, mientras hayan internos que corran con un canguro en la mano, y residentes que hagan hasta lo imposible por un caso “perdido”, siempre tendremos un motivo para estar contentos y orgullosos de ser lo que somos, porque sabemos que no se ha perdido el sentido de nuestro humilde oficio, que es, a mi humilde parecer y a pesar de lo que muchos digan, el mas noble de la humanidad.

martes, mayo 29, 2007

El grito del silencio

Hace unos días estuve leyendo un post de Danza acerca de la legalización del aborto en México, leí los diferentes comentarios al respecto, y como era de esperarse, este tema siempre crea gran controversia.
Y como no soy bueno haciendo posts de opinión, lo que mejor me pareció fue compartir con ustedes experiencias dentro del Hospital relacionadas con este tipo de prácticas.
Era Noviembre del 97, externo de Ginecología en mi Hospital y de guardia, habitualmente los externos se la pasan en sala de partos, pero esta vez el residente de tercer año me mandó a Emergencia porque había mucho trabajo, habían unos cuantos ingresos y teníamos que evaluarlos.
Uno de ellos era una mujer joven, de unos 20 años, que venía por sangrado de dos días y no paraba, decía que la menstruación era irregular, y “botaba coágulos”, y aquí la primera regla: Nadie viene a la emergencia de un Hospital por “coágulos”, debe haber algo más, le tomo la temperatura, casi 38ºC, un poco de dolor en el abdomen, y luego el examen ginecológico por el residente, que me llama y me enseña entre los coágulos que salían un tejido que aparentaba una consistencia diferente a la del coagulo, -“restos”- me dice, termina de cerrar las cortinas y me dice que me quede, y comienza a preguntar.
Residente: Porque vienes?
Paciente: Es que estoy sangrando Doctor
R: Por eso nomás?
P: Si Doctor
R: No te has hecho nada?
P: No doctor.
R: Cuando fue tu ultima regla?
P: ****/**/** (tres meses antes)
Le preguntó como 5 veces mas si se había hecho algo, hasta que ante tanta insistencia y con la última frase que es la definitiva –Mira, si te has hecho algo y no nos dices, te puedes hasta morir, porque es posible que tengas una infección ahí abajo- finalmente aceptó haberse practicado un aborto en algún lugar, fue necesario un legrado para sacar todos los restos de placenta que tenía infectados y un curso largo de antibióticos endovenosos.
Este es un caso clásico donde al final la paciente solo se quedó hospitalizada, sin embargo en ese mismo mes tuve el triste privilegio de ser el elegido para quedarme toda una madrugada monitorizando una dopamina (droga para levantar la presión en pacientes con shock) en una chica con shock séptico, una condición clínica crítica producto de una infección, finalmente la paciente ante la imposibilidad de controlar la infección con antibióticos tuvo que ser sometida a una Histerectomía abdominal total, o sea, se le tuvo que sacar el útero, que estaba completamente infectado, se le salvó la vida a cambio de quitarle la posibilidad de ser madre para siempre al menos de manera natural, y sin embargo, aun estando al borde de la muerte, no aceptó sino hasta después de la cirugía que se había practicado un aborto.
De estos últimos casos he visto alrededor de diez, infecciones por restos placentarios retenidos, perforaciones de útero, e incluso hay quien no llegó a tiempo a la emergencia y se quedó en el camino.
De los primeros casos he visto demasiados, hay tantos que realmente se horrorizarían de saber el número, y esto sólo en un Hospital en Lima, supongo que en otros es lo mismo, y lo que mas les llamaría la atención es saber que varias de las pacientes lo han hecho más de una vez.
Como persona tengo una opinión que intenta no opacar la objetividad profesional que debo mantener ante un paciente que acude a nosotros por un problema, cualquiera que sea, sé que me estoy metiendo en camisa de once varas al escribir de este asunto ya que hay quienes seguramente me pedirán una solución y no una opinión, y hay quien me dirá que estoy hablando piedras lo cual es perfectamente comprensible y es posible que sea cierto.
Si me preguntaran si nuestra sociedad peruana esta lista para tomar una decisión como la mejicana mi opinión seria que no estamos preparados para afrontar tamaña responsabilidad, la verdad no sé si ellos lo están, el diferente peso que se le otorgan a ciertos derechos fundamentales como la vida y la libertad individual en diferentes circunstancias, de acuerdo al cristal con que se miren y a quien lo mire, así como las diferencias entre las escalas de valores en los individuos de un mismo grupo humano, hacen que puntos como éste dividan mas a nuestra ya fragmentada sociedad.
He conocido personas en movimientos contra el aborto, comparto algunas de sus ideas, pero no la forma en la que quieren llegar a las personas, partiendo de una idea muy noble y que requiere dialogo terminan cerrándose en un circulo a través del cual no llegan a nadie mas allá de su pequeño campo de acción, y cuando hacen campañas en la población la gente va por los regalos y no escucha ni entiende un comino de lo que les quieren decir, no digo que sean todos, pero es lo que he visto.
He conocido personas que defienden a capa y espada el derecho de la mujer a decidir por su propio cuerpo teniendo en cuenta su derecho a la libertad individual, que no tienen porque traer a una criatura sin oportunidades a un mundo disfuncional del que ellos forman parte, y que dejan abierta la posibilidad de legalizar el aborto en el país, muchos de ellos gente muy preparada y que expone sus razones de una manera bastante decidida, nuevamente algunas de estas personas tampoco son muy susceptibles al diálogo, no todas pero igual, de que las hay, las hay.
Que hacer, entonces? Y ahí viene el dolor de cabeza, porque mientras todos gritan y se jalan de los cabellos, lo cierto es que la gente se sigue muriendo, mueren niños y mueren madres.
Legalizar el aborto “mejoraría” las cosas? Honestamente no lo creo, los abortos complicados corresponden generalmente a personas de bajos recursos, las mismas que no tendrán dinero para pagar un aborto “legal”, y como es costumbre nuestra, siempre habrá gente que quiera sacarle la vuelta al sistema, y gente que se prestará para que eso suceda.
Quedarnos así, de brazos cruzados, “mejoraría” las cosas? Parece que no, eso es lo que se ha venido haciendo todo este tiempo, ustedes que dicen?
Lo que humildemente desde mi posición veo es que es sorprendente que en un país que tiene un Programa de Planificación Familiar donde TODO desde la consulta hasta las medicinas es COMPLETAMENTE GRATIS, se tenga un número de complicaciones por abortos tan grande, no hablo de abortos sino de las complicaciones, lo cual hace suponer que el numero de abortos practicados pues debe ser considerablemente alto, entonces la pregunta que se cae de madura es…si no quieren tener hijos, porque no se cuidan en vez de abortar?.
No pretendo hacer analogías ni comparaciones con otras realidades porque no las conozco, pero si creo que lo primero que deben tener no solo las mujeres peruanas sino todos los peruanos es conciencia de lo que tenemos entre manos, y para ello debemos estar informados, pero no solo información en un papel con un corazón por gente que viene a tocarte la puerta una vez al mes, o no solo videos de fetos mutilados en las Universidades o en los grandes auditorios donde va gente que ya sabe como va el asunto, o repetir ese rollo del derecho a la libertad individual del que tanto hablamos pero que no entendemos o no queremos entender, sino todo el paquete completo, analizar las poblaciones en riesgo (adolescentes, personas de bajos recursos económicos, etc.) para que podamos medir la dimensión real de lo que tenemos al frente, y para ello, uno de los puntos importantes creo yo, es desenrollar toda la maraña que está alrededor de este tema y encontrar el verdadero problema que seguramente no es solo uno, y quizás solo entonces, una vez planteadas las formas de corregirlos, podamos preguntarnos nuevamente si es necesario ir mas allá tomando decisiones como la mexicana.
Talvez, y esta es de repente una esperanza tonta, si se lograran pulir esas aristas, talvez no sea necesario.

viernes, mayo 25, 2007

Los Jinetes del Apocalipsis


…Serán talvez los potros de bárbaros Atilas
o los Heraldos Negros que nos manda la muerte…

(Cesar Vallejo, Los Heraldos Negros-1918)

Sin llegar a ser dramático, quise poner esta introducción a propósito de un tema en el que quizá peque de redundante, pero como ha formado y forma parte de mi existencia, lo sigo mencionando y es el tema de los quesos y las nubes negras que los siguen cual fieles escuderos a donde quiera que se dirijan, provocando que los lugares donde estos sujetos se encuentren sean testigos de calamidades de gran magnitud.
En esta oportunidad me quiero referir exactamente a mi Promoción de Pregrado, la Promoción que egreso en Marzo del 99 de la Facultad de Medicina de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, y a cuatro sujetos que, a pesar de prácticamente nunca haber estado juntos entre ellos (los cuatro pertenecíamos a grupos diferentes, aunque una de ellos era muy amiga mía) fueron calificados por toda la promoción de manera unánime como calamidades andantes, y bajo el termino de quesos (para mayor información
este post), recibieron la dramática denominación de Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis.
Cuenta la historia (al decir historia me refiero a la gente alrededor de estos quesos), que a estos sujetos les ocurrían cosas inverosímiles, a pesar que la mayoría de veces hacían las cosas como debían ser, por alguna razón se provocaba un efecto dominó que concluía en catástrofe, y ese algo era, de manera comprobada, su sola presencia.

El primero de la lista en orden de apellido, aunque no lo voy a poner, era el llamado “Innombrable”, dice la vieja leyenda que si mencionas su nombre 3 veces acabas de invocar su aura y te sucederán desgracias una tras otra, es el único interno en la historia de la Emergencia de Pediatría en Cayetano que ha hecho que un R3 haga historia clínica 2 veces (para que un R3 haga historia tienen que haber 15 ingresos en la noche), y sus pisos parecian unidades de cuidados intensivos pediátricos.

La segunda es actualmente una flamante Pediatra especializada en Cuidados Intensivos Neonatales, pese a su aparente tranquilidad, cara de inocencia y al hecho que no mata una mosca, cada vez que pisaba algún lugar simplemente los pacientes comenzaban a perder presión, sangraban, o si pisaba una emergencia era seguro que ese día no descansaba ni el de limpieza, ha sido inmortalizada agregándole la palabra queso a su nombre de pila.
La tercera, una muy buena amiga mía, actualmente Geriatra, simplemente era de aquellos que se paran a mirar o a conversar contigo de pasada y al rato el paciente que estaba tranquilito dos camas mas allá se pone a convulsionar, el del frente hace dificultad respiratoria o un infarto delante tuyo y la abuelita de tres camas mas atrás entra en paro, ha sido la única persona que he visto que ha tenido tres paros en simultáneo en la Unidad de Cuidados Intensivos, y a pesar que es uno de los mejores médicos que conozco, estudiosa y con bastante capacidad de análisis, fue muy fácil saber en que mes roto en UCI cuando era residente, ya que la curva de mortalidad que normalmente no oscila mucho hizo un pico de sismógrafo sintiendo un grado 10, y es que los pacientes que tenia en ese tiempo eran penales inatajables.

El cuarto, vuestro humilde servidor, entró a este grupo de elite gracias a una historia que relate en este post, 8 baleados en una guardia no los tiene cualquiera, de externo en el Loayza recuerdo que en una guardia el Asistente del Servicio me pidió muy amablemente que me vaya a descansar, que duerma lo que quiera, pero que por favor no me acerque al tópico, que el me pone una buena calificación, en esa guardia no íbamos ni por la mitad del turno y ya teníamos 100 pacientes atendidos, lo cual para el Loayza es una barbaridad, luego que me fui vieron 15 mas en lo que quedó de la guardia, ninguno grave.
La situación no cambio para los 3 últimos luego de graduados, al innombrable le perdí el rastro luego de acabar la carrera (como ven solo lo he mencionado dos veces en todo el post), aunque supongo que al igual que nosotros, no ha perdido el aura negra.

La segunda quesa durante su residencia en Pediatría nunca hubo una noche que no me la cruce en el laboratorio parada esperando resultados con la clásica frase –Me quesee-
La tercera, nunca perdió el toque, ni de R3 ni de R4; piso que visitaba, piso que queseaba, no fueron pocas las veces en que, ya de R3 la tuve que botar de mi piso para que nuestras auras juntas no hagan colapsar el de por si ya endeble sistema.
En mi caso, de residente a veces en las guardias me aburría de estar en piso y bajaba a ver que tenían en la emergencia, mi compañero R1 (que por esos azares de la vida era casi siempre el mismo, mi buen amigo el Cheng) me comenzaba a maldecir ya que en ese preciso instante aparecía un anciano vomitando sangre, una abuelita traída por los bomberos respirando 60 veces por minuto, y alguno que otro paciente con un accidente cerebrovascular (derrame), incluso los asistentes me miraban con cara de resignación cuando estaba de guardia. Cuando trabaje en una Institución del Estado por unos meses antes de venir a Japón, solo medio turno, diagnostiqué una apendicitis, una hemorragia ginecológica, dos infartos entre otras cosas, en un lugar que había pedido medico solo para cumplir con ciertos requisitos por ser una Institución bastante grande.

Como dice uno de mis mejores amigos, refiriéndose a nosotros, - No has escuchado hablar de los cuatro jinetes del apocalipsis? Donde pisan no crece la hierba-

Despues de todo, que me queda decir, al menos, somos cuatro sujetos fácilmente ubicables en una promoción de 120, aunque la razón va entre la anécdota, la superstición y la forma de vida dentro de un Hospital.

miércoles, mayo 23, 2007

Una piedra en el camino

Estuve alejado del mundo de los blogs por unas semanas debido a que se acaba de iniciar un proyecto grande que estaba esperando desde hace un tiempo en el laboratorio, cuando me di cuenta ya había pasado una semana y no había leído posts ni hecho ninguno, y al poco tiempo ya habían pasado dos, y así sucesivamente, hace unos días en un descanso escribí dos posts, pero como los hice en la laptop del laboratorio (que no tiene acentos), tenia que tomarme el trabajo de pasarlos a mi maquina, y eso dejó a los mencionados posts en el limbo del cual espero recuperarlos en algún momento.
Ahora les quiero contar de un caso cuya particularidad es que el paciente en cuestión es nada menos que quien les escribe, si, los médicos también nos enfermamos.
Corría el verano del 2005, R3 de Medicina Interna en ese momento rotando en Piso, Jefe de Residentes del Departamento de Medicina del Hospital, con todas las cargas académicas y administrativas que eso implica, que fulanito no vino, que zutanito llego tarde a la guardia, que los residentes de emergencia no se dan abasto, que el cirujano no viene a ver al paciente, que la reunión de tal día todavía no tiene expositor, que te llaman de Jefatura, de la Dirección, y una larga lista de etcéteras que obviamente no voy a mencionar para no estresarme.
Un día miércoles en la tarde, salía de piso directo a la Ronda de Cardiología, y a medio camino un ligero dolor en la espalda llamó mi atención, fue súbito, intenso, pero como andaba con mil cosas en la cabeza, seguí caminando y pensando en lo que había que hacer, al llegar al auditorio me llaman los residentes de cardiología, hay una angioplastía y el asistente que debe estar en la reunión ha entrado a sala de cateterismos, doy por suspendida la reunión y les informo a los residentes, sigo con el dolor que esta vez se hace mas intenso y me dificulta caminar, lo hago pero un poco inclinado y tomándome la región lumbar con la mano derecha, aun queriendo creer que era solo un “dolorcito” aunque era obvio que no, fui a la emergencia, donde me tomé unas pruebas, confirmándose mi mayor temor: cólico renal, urolitiasis, o cálculos en los riñones, como quieran llamarlo.
Cuando el dolor se agudizó tuve que apoyarme en una camilla, aunque la verdad el dolor es tan intenso que no existe una posición que lo calme, dicen que es un dolor comparable a los dolores del parto, de ser así, mis respetos a todas aquellas mujeres que han tenido partos normales; el asistente me obligó a sentarme y me pusieron un opiáceo para el dolor (y me plancharon) con ello calmó y aunque estuve fuera de combate unas horas, a las 7 de la noche ya estuve en condiciones de pasar una pequeña visita en el piso para enterarme que había pasado en mi ausencia, al irme a mi casa, me dejé la vía puesta en el brazo, hombre precavido vale por dos, el dolor me asaltó en la madrugada y tuve que recurrir nuevamente a un potente analgésico.
La urolitiasis, o cálculos en la vía urinaria, es una enfermedad bastante frecuente, ocurre cuando hay un excesivo depósito de cristales en la vía urinaria, preferiblemente en los cálices renales y se comienzan a formar estructuras sólidas que llegan en muchos casos a obstruir total o parcialmente el flujo de orina de ese lado.
Cuando el calculo formado es empujado por la orina y sale del riñón, pasa a través del uréter (conducto que comunica el riñón con la vejiga), donde puede lesionar el interior del mismo, provocando un pequeño sangrado que puede o no verse en la orina, dependiendo de la intensidad del mismo.
Por otro lado, el pasaje del calculo a través del uréter no es rápido, sino que toma su tiempo, las fibras musculares del uréter van empujando el calculo hacia la vejiga, mientras la orina se va acumulando, dilatando el ureter por la cantidad de volumen que hay por encima del calculo, esta dilatación es la que provoca el dolor intenso, lancinante y característico del cólico renal.
El tratamiento consiste en calmar el dolor, hidratar al paciente y esperar que el uréter haga su trabajo y elimine el calculo hacia la vejiga, momento en que el dolor cede, para luego convertirse en una ligera molestia previa a la expulsión del calculo durante la micción.
Este episodio fue traído a colación que el Domingo de la semana pasada, casi dos años después del primer episodio, el lado izquierdo de mi aparato excretor me jugó otra vez una mala pasada, si bien esta vez no fue en el Hospital, el dolor fue mas intenso, tanto como para pensar en meterte un cabezaso contra una pared de ladrillos sin tarrajear para ver que duele mas, afortunadamente si bien yo no ejerzo aquí, los colegas japoneses de mi laboratorio si, un amigo me llevo a su Clínica donde recibí unos calmantes y unos días después el calculo con forma de estrella ninja (es que estamos en Japón pues) finalmente salió.
No todas las piedras en el camino son necesariamente metafóricas, algunas incluso están literalmente dentro de uno, sin embargo, liberarse de ellas y enfrentar la adversidad que suponen siempre es una respuesta común, para todas las piedras que uno encuentra en el rumbo que haya decidido, literales o no.

Gracias a todos por sus saludos mientras estuve ausente, aqui estan las señales de vida, prometo ponerme al día en sus blogs.

miércoles, abril 18, 2007

De investigación, colesteroles y otros postres

En este blog muchas veces muestro cosas que han pasado en mi vida dentro del Hospital cuando hacía mi residencia en Lima, historias de pacientes, casos, residentes, y anécdotas que de una u otra manera colaboraron en mi formación como especialista en Medicina Interna, aunque de esto ya han pasado casi dos años.
Así que les cuento mejor un poco de lo que hago aquí en Japón, no es tan llamativo como correr en una emergencia y agarrar un desfibrilador pero tiene su atractivo.
Venir a estas lejanas tierras de oriente, al pueblo del sol naciente, fue una decisión basada en la idea de que mi labor académica debía crecer un poco, y dado que un campo que me agrada muchísimo son las enfermedades cardiovasculares, decidí que mi siguiente paso debería ser un Postgrado en Enfermedades Cardiovasculares, decisión en la que mi ascendencia japonesa no tuvo nada que ver, sino mas bien la información que había recogido previamente acerca de la investigación, publicaciones y posibilidades de financiamiento, de esta manera estoy aquí haciendo un Doctorado en Enfermedades Cardiovasculares con mención en Aterosclerosis por medio de una beca del Gobierno Japonés a través de su Embajada en el Perú.
Como saben el corazón es el órgano que se encarga de bombear la sangre a los diferentes lugares del cuerpo, su mal funcionamiento indicaría que la sangre, y por consiguiente el oxigeno que hay en ella no llegan a los diferentes órganos de manera que éstos no pueden cumplir sus funciones de manera adecuada y en algunos casos hasta las pierden permanentemente.
Dado que el corazón esta conformado por células, para ser mas preciso, células musculares en su gran mayoría, necesita también oxígeno para cumplir su función, este oxígeno es suministrado por la sangre a través de las famosas arterias coronarias, las cuales por medio de sus ramificaciones en el interior del corazón, hacen que el oxígeno llegue hasta el rincón mas íntimo de nuestro noble amigo.
Sin embargo, ocurre que con el tiempo, estas arterias coronarias sufren un constante deposito de material orgánico, principalmente de origen graso: Colesterol, ácidos grasos, que asociadas a cambios en la función de la capa de la arteria en contacto con la sangre llamada endotelio, pueden llegar a obstruirla parcialmente primero, y totalmente después, provocando síntomas como dolor de pecho, cansancio, etc.
Al no llegar sangre, y por lo tanto oxígeno a las células cardiacas, estas mueren, a esto se le conoce como infarto cardiaco, dependiendo de la arteria afectada se verá involucrada mayor o menor cantidad de tejido, claro está que si el tejido cardiaco muere, esa parte del corazón ya no participa en el bombeo, e incluso todo el corazón puede dejar de funcionar.
Pues bien, el proceso por el cual se deposita este material orgánico en las arterias se llama aterosclerosis, y en el participan ácidos grasos, proteínas transportadoras, lipoproteínas, e infinidad de otras moléculas, incluido el colesterol, algunas de las cuales son factores de riesgo muy importantes para desarrollar enfermedad cardiovascular.
Ahí es donde entramos nosotros, nuestra pequeña colaboración en este amplio universo de investigación en enfermedad cardiovascular consiste en desarrollar nuevas propuestas, técnicas y hallar nuevas alternativas de tratamiento para este flagelo del mundo moderno, enfocados en el colesterol HDL (High density lipoprotein) o como se le conoce comúnmente “colesterol bueno” que ha demostrado ser un importante factor favorable para la protección contra la enfermedad coronaria.
Para ello se trabaja con cultivos celulares, y también con animales de laboratorio, ya que estamos en las primeras fases de cualquier investigación alrededor de nuevos métodos de detección, mecanismos de acción y nuevos medicamentos.
Al mismo tiempo, no se puede estar alejado de la practica clínica, una vez a la semana Sala de Cateterismos y al menos un par de veces a la semana hay que ir a las visitas médicas a pacientes en el Piso de Medicina Interna del Hospital Universitario, uno de los mas grandes y equipados de la ciudad, y ahí se puede comprobar que definitivamente en tecnología están mas que adelantados a nosotros, valga la redundancia, en tecnología y creo que en nada mas.
La investigación, como dice aquí uno de mis profesores, “Te permite hacer algo que la práctica clínica no te puede brindar, en el Hospital cuando encuentras una solución, salvas una vida, en cambio cuando en el laboratorio encuentras la respuesta a lo que estabas buscando, puedes salvar muchas, te sientes reconfortado, te dan ganas de continuar y siempre que quieras puedes volver al Hospital”
Se nos ha enseñado que el médico es asistencial, es investigador y es docente, mi vida y mi escuela en el Perú me enseñaron a ser asistencial, y me lo enseñaron muy bien, también me mostraron la investigación aunque sin llegar a formar parte de ella, no al menos en lo que me gusta; ahora en este lugar tan lejano de mi casa estoy aprendiendo que puedo ser investigador, diariamente busco alguna respuesta a las muchas preguntas que se formulan en mi cabeza, día a día en ensayo y error, y solo el tiempo me dirá si todo esto que ahora me hace darme cabezazos contra la pared de vez en cuando me servirá para ayudar como docente a otros en su búsqueda, así como yo tuve y tengo generosos profesores y amigos que me ayudaron y ayudan en la mía.
Venir a Japón ha sido una de las decisiones mas cuestionadas que he tenido en toda mi carrera, ahora aquí, a mitad del camino solo puedo decir que todas las decisiones son cuestionables si las miras con el vaso medio vacío, me he dado cuenta que además de darme un grado académico, que es a lo que vine, es una experiencia enriquecedora en términos de mirar de otra manera la medicina, al paciente y al médico, y otra manera de conocerse a uno mismo.
La idea es continuar el camino aprendido y señalado, mirando nuestro norte e insistiendo en lo que uno cree.
Sir William Osler dijo una vez "Haber dado todo, haber hecho el esfuerzo, haber sido consecuente a ciertos ideales…por solo esto vale la pena la lucha."

Así es, perseverancia y seguir ese camino, ese solo hecho vale la pena.

lunes, abril 16, 2007

Temblores

Imagen de como quedo la autopista a Osaka luego del gran terremoto de Kobe en 1995, tomado de http://web.ics.purdue.edu/~braile/edumod/eqphotos/eqphotos2.htm

Japón es una zona eminentemente volcánica, y la conjunción de placas bajo estas 4 islas hacen que sea una de las regiones más proclives a desarrollar movimientos sísmicos en el mundo. Hay numerosas fallas que corren a lo largo de Japón asociadas con zonas de subducción (donde una placa se desliza debajo de otra), que originan los volcanes, causando innumerables movimientos sísmicos mayores o menores.
El gran terremoto de Kanto en 1923 tuvo posiblemente 8 grados en la escala de Richter matando a 140000 personas y destruyendo un tercio de Tokio y la mayor parte de Yokohama, se dice que la región de Kanto, el centro de la isla mas grande (Honshu) sufre un gran terremoto cada 70 años, por lo que se debe estar preparado ya que el próximo podría ocurrir en cualquier momento.
El segundo terremoto mas desastroso fue el Gran Terremoto de Kobe, en 1995, muy cerca de aquí, de 7.2 grados de magnitud, muriendo 6433 personas, y la onda expansiva fue muy grande, llego hasta la zona norte de la Prefectura de Osaka, justo donde se ubica la Universidad de Osaka y sus dos campus, afortunadamente sin mayores daños en las estructuras que sin embargo requirieron reparación posterior.
En Marzo del 2005 en Fukuoka, en la isla meridional de Kyushu, de donde procede mi familia, tuvo un terremoto de 7 grados de magnitud, falleciendo una persona y provocando daños materiales considerables.
Menciono todo esto porque desde mi llegada a estas tierras, había experimentado solo un par de temblores, muy leves y que no representaron ningún problema, de eso hace más de un año.
Sin embargo, en menos de un mes, se han presentado movimientos sísmicos de magnitud considerable, el primero de ellos sucedió el 26 de marzo en la Prefectura de Ishikawa, al norte de aquí, de 6.9 grados, aunque en esta zona se sintió como un temblor, en la zona cercana al epicentro fue muy intenso, falleciendo una persona aplastada por un farol de piedra, y con numerosas pérdidas materiales, ademas hubo alerta de tsunami.
El día de ayer, un temblor de 5.4 grados se presento en la Prefectura de Mie, a unos 70 Km. de Osaka y 6 horas después hubo otro de 4.7 grados en Nagoya, a 100 Km. de aquí, ambos se sintieron con cierta intensidad, llegando a detener el transporte y las líneas de tren por un tiempo, especialmente la línea del Shinkansen o tren bala.Tomado de la pagina del US Geological Survey (USGS)

Al ser Japón una zona sometida constantemente a este tipo de amenazas naturales, hay un sistema bastante efectivo de prevención de daño y de manejo de estas situaciones, desde como ordenar las cosas en la casa, asegurar los armarios contra la pared fijándolos, siempre existe la indicación de tener un equipo de supervivencia, con linterna, baterías, una radio, documentos importantes, agua, y la indicación de las áreas de refugio y rutas de escape en caso de edificios y lugares de gran concurrencia, también tienen un sistema de evacuación así como un estricto sistema de control de calidad de las construcciones nuevas para evitar el desplome de los edificios.

No todo podía ser udón, sakuras y aguas termales, también existen los temblorcitos.

sábado, abril 14, 2007

Consejos de Esculapio

Navegando por la red, hace un buen tiempo encontré en una página de Etica Médica un artículo que me pareció muy interesante, y me gustaría compartirlo, se dice que es muy antiguo y se titula Consejos de Esculapio a su hijo

¿Quieres ser médico, hijo mío?

Aspiración es esta de un alma generosa, de un espíritu ávido de ciencia.

¿Deseas que los hombres te tengan por un dios que alivia sus males y que ahuyenta de ellos el espanto?

¿Has pensado bien en lo que ha de ser tu vida? La mayoría de los ciudadanos pueden, terminada su tarea, aislarse lejos de los inoportunos; tu puerta quedará siempre abierta a todos; vendrán a turbar tus sueños, tus placeres, tu meditación; ya no te pertenecerás. Los pobres, acostumbrados a padecer, no te llamarán sino en caso de urgencia; pero los ricos te tratarán como a un esclavo encargado de remediar sus excesos; sea porque tengan una indigestión, sea porque estén acatarrados, harán que te despierten a toda prisa tan pronto como sientan la menor inquietud; habrás de mostrar interés por los detalles más vulgares de su existencia, decidir si han de comer cordero o carnero, si han de andar de tal o cual modo. No podrás ausentarte, ni estar enfermo, tendrás que estar siempre listo para acudir tan pronto te llame tu amo.

¿Tienes fe en tu trabajo para conquistarte una reputación? Ten presente que te juzgarán no por tu ciencia, sino por las casualidades del destino, por el corte de tu capa, por la apariencia de tu casa, por el número de tus criados, por la atención que dediques a las charlas y a los gustos de tu clientela. Los habrá que confiarán en ti si no vienes del Asia; otros si crees en los dioses; otros si no crees en ellos. Tu vecino el carnicero, el tendero, el zapatero, no te confiará su clientela si no eres parroquiano suyo; el herborista no te elogiará, sino en tanto que recetes sus hierbas.

Habrás de luchar contra las supersticiones de los ignorantes.

¿Te gusta la sencillez?, habrás de adoptar la actitud de un augur.

¿Eres activo, sabes qué vale el tiempo?, no habrás de manifestar fastidio ni impaciencia; tendrás que aguantar relatos que arranquen del principio de los tiempos para explicarte un cólico.

¿Sientes pasión por la verdad? Ya no podrás decirla. Habrás de ocultar a algunos la gravedad de su mal, a otros su insignificancia, pues les molestaría. Habrás de ocultar secretos que posees, consentir en parecer burlado, ignorante, cómplice.

No te será permitido dudar nunca: si no afirmas que conoces la naturaleza de la enfermedad, que posees un remedio infalible para curarla, el vulgo irá a charlatanes que venden la mentira que necesita.

No cuentes con agradecimientos: cuando el enfermo sana, la curación es debido a su robustez; si muere, tú eres quien lo ha matado. Mientras está en peligro te trata como a un Dios, te suplica, te promete, te colma de halagos; no bien está en convalecencia ya le estorbas; cuando se trata de pagar los cuidados que le has prodigado, se enfada y te denigra.

Te compadezco si sientes afán por la belleza: verás lo más feo y más repugnante que hay en la especie humana; todos tus sentidos serán maltratados. Habrás de pegar tus oídos contra el sudor de pechos sucios, respirar el olor de míseras viviendas, los perfumes harto subidos de las cortesanas, palpar tumores, curar llagas verdes de pus, contemplar los orines, escudriñar los eructos, fijar tu mirada y tu olfato en inmundicias, meter el dedo en muchos sitios. Te llamarán para un hombre que, molestado por dolores de vientre, te presentará un bacín nauseabundo, diciéndote satisfecho "gracias a que he tenido la precaución de no tirarlo". Recuerda entonces que habrá de parecer interesarte mucho aquella deyección. Hasta la belleza misma de las mujeres, consuelo del hombre se desvanecerá para ti. Las verás por la mañana, desgreñadas y desencajadas desprovistas de bellos colores, olvidando sobre los muebles parte de sus atractivos. Cesarán de ser Diosas para convertirse en pobres seres afligidos por la desgracia. Sentirás por ellas menos deseos que compasión.

Tu oficio será para ti una túnica de Neso: en la calle, en los banquetes, en el teatro, en tu cama misma, los desconocidos, tus amigos, tus allegados te hablarán de sus males para pedirte un remedio. El mundo te parecerá un vasto hospital, una asamblea de individuos que se quejan. Tu vida transcurrirá en la sombra de la muerte, entre el dolor de los cuerpos y de las almas, de los duelos y de la hipocresía que calcula, a la cabecera de los agonizantes.

Te verás solo en tus tristezas, solo en tus estudios, solo en medio del egoísmo humano. Cuando a costa de muchos esfuerzos hayas prolongado la existencia de algunos ancianos o de niños deformes, vendrá una guerra que destruirá lo más sano y lo más robusto que hay en la ciudad. Entonces, te encargarán que separes los débiles de los fuertes, para salvar a los débiles y enviar a los fuetes a la muerte.

Piénsalo bien mientras estás a tiempo. Pero si, indiferente a la fortuna, a los placeres, a la ingratitud; si sabiendo que te verás solo entre las fieras humanas, tienes un alma lo bastante estoica para satisfacerte por el deber cumplido sin ilusiones; si te juzgas pagado lo bastante con la dicha de una madre, con una cara que sonríe porque ya no padece, con la paz de un moribundo a quien ocultas la llegada de la muerte: Si ansías conocer al hombre, penetrar todo lo trágico de su destino, entonces hazte médico, hijo mío.

Que así sea.

Tomado de la página del Sindicato Médico del Uruguay, click aquí

jueves, abril 12, 2007

Mi ohanami en el Parque de la Expo'70

El ohanami de mi laboratorio fue programado para el día domingo pasado, el lugar, el Parque Conmemorativo de la Expo’70 en Osaka, localizado en el suburbio de Suita, que es donde yo vivo, muy cerca de la Facultad de Medicina y del Hospital Universitario.
Para los que no sepan o no lo recuerden, cada cierta cantidad de años se hacen exposiciones mundiales publicas, las cuales son consideradas el tercer evento periódico mas grande del mundo después de los mundiales de fútbol y las olimpiadas; dichas exposiciones se vienen realizando desde hace mas de 150 años en diferentes ciudades del planeta, que por unos meses se convierten en las capitales mundiales de la tecnología, educación, ciencia y cultura mundial, permitiendo el intercambio cultural, participando en la búsqueda activa de soluciones a problemas de actualidad, además de darle una imagen a los países participantes que marque su identidad. Estas exposiciones en suma buscan como objetivo reflejar y causar impacto en temas universales en el amplio espectro de la experiencia del ser humano.
Para este tipo de eventos, el país organizador se encarga de desarrollar obras monumentales y colosales que sobresalgan y permanezcan en la memoria de generaciones futuras, en este sentido, el año 1970, en pleno crecimiento japonés, se escogió Suita, en ese entonces un suburbio alejado del centro de la ciudad de Osaka para construir los Pabellones, Estadios y un enorme monumento recordando este evento.
El sitio donde se realizo la Expo’70 se convirtió años después en un Parque inmenso conocido como Banpakukinenkoen, o Parque conmemorativo de la exposición, cuyo símbolo principal, el Taiyo-to o la torre del sol, una estructura de 75 metros de altura, se ve a varios kilómetros de distancia, el parque es muy visitado por los atractivos que tiene, como los clásicos jardines y el museo de etnología, así como por la gran cantidad de campos deportivos que hay dentro de sus límites.

Sin embargo en esta oportunidad ir a ver el Museo o hacer algo diferente a ir de día de campo hubiera sido prácticamente imposible, el lugar estaba absolutamente lleno, incluso hubo que caminar un poco mas de la cuenta para poder pensar donde podíamos instalarnos ya que nuestro grupo no era muy pequeño de digamos, al final se encontró un buen sitio y comenzó el ohanami propiamente, que era a lo que habíamos ido.

Fue un buen día, conversando, hubo bastante comida, un profesor llevo unas botellas de vino, sake, y un amigo trajo las cervezas, que son una tradición en este tipo de celebraciones.
E incluso hubo quien trajo una guitarra con sus cancioneros, los cuales estaban obviamente en japonés, igual se hizo lo que se pudo.

Como mencionaba en el post anterior, en esta época se inician los años académicos en Japón, y por lo tanto también los de Postgrado, se dio la bienvenida a unos médicos recién llegados a hacer investigación, se felicitó a dos chicas por haber ingresado al Doctorado luego de haber hecho investigación durante 6 meses, se despidió a una bióloga muy buena gente que esta yendo a un Post Doctorado en Boston, y yo me sentí mejor al darme cuenta que ya estaba en Segundo año de Doctorado y ya no estoy tan abajo en la cadena de mando del laboratorio; en resumen, todos estaban contentos.
Hoy, solo unos días después del ohanami, los pétalos de sakura ya están comenzando a caer, dejando finas alfombras en el suelo de los parques, el clima esta cada vez mas cálido y húmedo, y la época de lluvias llegará pronto, sin embargo, estar sentado bajo uno de estos árboles, en contacto con la naturaleza, te permite abstraerte por un momento a pesar de la multitud, sentir el viento empujar las ramas y ver caer estos copos de algodón ininterrumpidamente, al menos para mi, es una experiencia que te saca de la rutina y te sitúa frente a un cuadro pintado en una primavera, colgado hace mucho tiempo.
Una vez leí en un viejo libro que un niño conversaba con un anciano acerca de una experiencia vivida en un bosque mágico, y le decía que era como estar dentro de una pintura, la verdad en ese momento creí entender de que se trataba, pero no sabía cuanta verdad podía encerrar esa frase.
No solo en los cuentos uno puede sentirse dentro de una pintura.

Hasta el otro año, sakura.