Es solo la imagen de un bus que bajé de internet, no he puesto otras imágenes para no herir susceptibilidades.
Cuando estaba en Lima las veía por televisión o las leía en el periódico, ahora que estoy lejos, las leo por Internet, me refiero a las noticias, y cuando a tragedias se refiere, es poco usual que estas no estén relacionadas a un bus interprovincial.
Y es que para todos los que hemos viajado en esos buses, parece que salvo raras excepciones, hubiera un concurso para ver quien es el más delincuente de los choferes, el que gana se queda con el puesto.
Para muestra dos botones:
Corría el año 1994, estabamos en 4to año de medicina y unos amigos y yo decidimos aceptar la invitación de la madre de uno de nosotros de ir a pasar las vacaciones de medio año a la casa de los abuelos en el poblado de Huallanca, entre Ancash y Huanuco, primero fuimos a Huaraz e hicimos un poco de turismo por ahí unos 3 dias y el cuarto nos encaminamos a dicho pueblo, ese día trajo tantas penurias que podrían ser motivo de un post, basta con resumir que el carro que nos iba a recoger nunca llegó, que tomamos una camioneta que se malograba cada 2 kilómetros y había que empujarla, que en ese plan llegó la noche, que nos perdimos en esa noche con granizo y sin luna a mas de 4000 metros de altura mientras la camioneta se alejaba luego de agarrar fuerza después de empujarla, y que tuve un episodio de broncoespasmo (crisis asmática) por primera vez en mi vida, en aquel recóndito lugar de la serranía peruana; a lo que iba, finalmente el carro murió y nos quedamos adentro esperando que pase otro que nos lleve, y como a las 11 de la noche aparece un Interprovincial, el carro ya estaba lleno, entramos como pudimos, parecía un micro, en fin, mientras comenzábamos a formar parte de la masa humana compacta dentro del bus escuché una musiquita folklórica y unos golpes en la cabina del conductor, y adivinen que, el chofer ESTABA ZAPATEANDO EL HUAYNO mientra conducía, al tiempo que la terramoza y el ayudante o lo que fuere estaban bebiendo algo en tragos pequeños que no parecía gaseosa precisamente, intenté observar el panorama afuera, no se veía nada y la carretera afirmada era para un solo vehículo, sumamente angosta, aun así, el conductor seguía en su zapateo, el cual solo se detuvo en la garita de control policial de una mina cercana, aunque llegamos a destino (asustados pero llegamos), al salir se notaba el tufazo que había en la cabina, si el chofer estuvo chupando, es posible; aquí viene lo peor, días después una de las tías de mi amigo nos cuenta que uno de los carros de la misma empresa que nos trajo se desbarrancó a los dos días, de regreso a Lima, apuesto a que fue ese.
El año 2001, ya como médico, estuve haciendo unos trabajos para una empresa privada, básicamente chequeos de personal, uno de ellos fue en una mina que queda a una hora de Oyón, camino a Cerro de Pasco, no recuerdo el nombre, el punto es que en el camino de ida, entre Churín y Oyón, una de las dos 4x4 que nos llevaba sufrió un desperfecto, el problema era que eso ocurrió justo en un tramo estrecho de carretera afirmada, en un lado el cerro y en el otro un precipicio bastante profundo, los conductores estaban revisando el carro cuando aparece un interprovincial (Ojo, era de día) y el chofer de la camioneta donde yo iba le hace señas para que se detenga con el fin de cuadrar mejor los carros para que el bus pueda pasar bien, no se que habrá entendido el tipo que manejaba el bus, la cosa es que con un ademán con la mano de “vete a la ….” siguió avanzando, pasó a un costado de nuestra camioneta pero al pasar al costado de la segunda ya no tenía espacio, y giró con todo , aún así no fue suficiente y rozó la camioneta, y lo peor de todo fue que una de las llantas se quedó enganchada entre un poco de tierra suelta y una piedra grande, no hubiera sido problema si esto no hubiera ocurrido a escasos centímetros del precipicio, y lo siguiente fue que el chofer, en vez de retroceder el carro para colocarlo en un lugar seguro, SE BAJO A PELEAR con los conductores de las camionetas, primero que era totalmente ridículo, el chofer del bus no medía ni metro y medio y pesaba menos de 50 kilos, menos de la mitad de lo que medía y pesaba uno de los otros tipos, y segundo, que estaba dejando el bus en una situación completamente alarmante, el ayudante le pasaba la voz asustado, y lo mas trágico es que el bus, por el peso y la tierra suelta, comenzó a ceder poco a poco hacia el precipicio, yo no podía creer lo que veía, mientras le gritábamos a ese idiota para que regrese a su bus y lo retroceda pero no hacía caso y seguía insultando a los conductores, para esto la gente se comenzó a bajar por las ventanas del bus, y fueron los mismos pasajeros los que agarraron al tipo ese y lo metieron al bus para que lo saque de ahí, por fortuna no pasó nada mas, aunque al llegar a Oyón parece que la gente del bus denunció al chofer a la comisaría y el sinvergüenza en el colmo de la falta de conciencia denunció a los choferes de las camionetas, hasta ahora no se porque, claro que quedó sin efecto cuando vieron el brevete del tipo que no era profesional.
Si yo, que no viajo mucho, me encontré con estos señores, es posible que el número de estos irresponsables sea muy alto, llegar a asistir a un lugar donde ha caído un bus es una de las peores cosas que me ha tocado vivir como médico, es una escena que no se te borra jamás de la memoria, y te das cuenta de lo absurdo que es morirse porque el miserable que manejaba el carro estaba borracho o porque simplemente es un estúpido como el tipo de unas líneas arriba.
El plan Tolerancia cero que se ha implantado, aparentemente esta dando mejores resultados, al menos las noticias de caídas de buses son menos frecuentes que antes, sin embargo, la irresponsabilidad sigue siendo la misma, esperemos que las sanciones sean ejemplares, porque intentar llegar a la conciencia de esa gente es algo que va mas allá de todo esfuerzo.
Y encima se atreven a hacer huelgas y a bloquear carreteras…esta gente merece que les caiga todo el peso de la ley, talvez así se pueda aminorar o solucionar el problema y los potenciales pasajeros puedan viajar tranquilos a través de los hermosos paisajes de nuestro Perú.
Y es que para todos los que hemos viajado en esos buses, parece que salvo raras excepciones, hubiera un concurso para ver quien es el más delincuente de los choferes, el que gana se queda con el puesto.
Para muestra dos botones:
Corría el año 1994, estabamos en 4to año de medicina y unos amigos y yo decidimos aceptar la invitación de la madre de uno de nosotros de ir a pasar las vacaciones de medio año a la casa de los abuelos en el poblado de Huallanca, entre Ancash y Huanuco, primero fuimos a Huaraz e hicimos un poco de turismo por ahí unos 3 dias y el cuarto nos encaminamos a dicho pueblo, ese día trajo tantas penurias que podrían ser motivo de un post, basta con resumir que el carro que nos iba a recoger nunca llegó, que tomamos una camioneta que se malograba cada 2 kilómetros y había que empujarla, que en ese plan llegó la noche, que nos perdimos en esa noche con granizo y sin luna a mas de 4000 metros de altura mientras la camioneta se alejaba luego de agarrar fuerza después de empujarla, y que tuve un episodio de broncoespasmo (crisis asmática) por primera vez en mi vida, en aquel recóndito lugar de la serranía peruana; a lo que iba, finalmente el carro murió y nos quedamos adentro esperando que pase otro que nos lleve, y como a las 11 de la noche aparece un Interprovincial, el carro ya estaba lleno, entramos como pudimos, parecía un micro, en fin, mientras comenzábamos a formar parte de la masa humana compacta dentro del bus escuché una musiquita folklórica y unos golpes en la cabina del conductor, y adivinen que, el chofer ESTABA ZAPATEANDO EL HUAYNO mientra conducía, al tiempo que la terramoza y el ayudante o lo que fuere estaban bebiendo algo en tragos pequeños que no parecía gaseosa precisamente, intenté observar el panorama afuera, no se veía nada y la carretera afirmada era para un solo vehículo, sumamente angosta, aun así, el conductor seguía en su zapateo, el cual solo se detuvo en la garita de control policial de una mina cercana, aunque llegamos a destino (asustados pero llegamos), al salir se notaba el tufazo que había en la cabina, si el chofer estuvo chupando, es posible; aquí viene lo peor, días después una de las tías de mi amigo nos cuenta que uno de los carros de la misma empresa que nos trajo se desbarrancó a los dos días, de regreso a Lima, apuesto a que fue ese.
El año 2001, ya como médico, estuve haciendo unos trabajos para una empresa privada, básicamente chequeos de personal, uno de ellos fue en una mina que queda a una hora de Oyón, camino a Cerro de Pasco, no recuerdo el nombre, el punto es que en el camino de ida, entre Churín y Oyón, una de las dos 4x4 que nos llevaba sufrió un desperfecto, el problema era que eso ocurrió justo en un tramo estrecho de carretera afirmada, en un lado el cerro y en el otro un precipicio bastante profundo, los conductores estaban revisando el carro cuando aparece un interprovincial (Ojo, era de día) y el chofer de la camioneta donde yo iba le hace señas para que se detenga con el fin de cuadrar mejor los carros para que el bus pueda pasar bien, no se que habrá entendido el tipo que manejaba el bus, la cosa es que con un ademán con la mano de “vete a la ….” siguió avanzando, pasó a un costado de nuestra camioneta pero al pasar al costado de la segunda ya no tenía espacio, y giró con todo , aún así no fue suficiente y rozó la camioneta, y lo peor de todo fue que una de las llantas se quedó enganchada entre un poco de tierra suelta y una piedra grande, no hubiera sido problema si esto no hubiera ocurrido a escasos centímetros del precipicio, y lo siguiente fue que el chofer, en vez de retroceder el carro para colocarlo en un lugar seguro, SE BAJO A PELEAR con los conductores de las camionetas, primero que era totalmente ridículo, el chofer del bus no medía ni metro y medio y pesaba menos de 50 kilos, menos de la mitad de lo que medía y pesaba uno de los otros tipos, y segundo, que estaba dejando el bus en una situación completamente alarmante, el ayudante le pasaba la voz asustado, y lo mas trágico es que el bus, por el peso y la tierra suelta, comenzó a ceder poco a poco hacia el precipicio, yo no podía creer lo que veía, mientras le gritábamos a ese idiota para que regrese a su bus y lo retroceda pero no hacía caso y seguía insultando a los conductores, para esto la gente se comenzó a bajar por las ventanas del bus, y fueron los mismos pasajeros los que agarraron al tipo ese y lo metieron al bus para que lo saque de ahí, por fortuna no pasó nada mas, aunque al llegar a Oyón parece que la gente del bus denunció al chofer a la comisaría y el sinvergüenza en el colmo de la falta de conciencia denunció a los choferes de las camionetas, hasta ahora no se porque, claro que quedó sin efecto cuando vieron el brevete del tipo que no era profesional.
Si yo, que no viajo mucho, me encontré con estos señores, es posible que el número de estos irresponsables sea muy alto, llegar a asistir a un lugar donde ha caído un bus es una de las peores cosas que me ha tocado vivir como médico, es una escena que no se te borra jamás de la memoria, y te das cuenta de lo absurdo que es morirse porque el miserable que manejaba el carro estaba borracho o porque simplemente es un estúpido como el tipo de unas líneas arriba.
El plan Tolerancia cero que se ha implantado, aparentemente esta dando mejores resultados, al menos las noticias de caídas de buses son menos frecuentes que antes, sin embargo, la irresponsabilidad sigue siendo la misma, esperemos que las sanciones sean ejemplares, porque intentar llegar a la conciencia de esa gente es algo que va mas allá de todo esfuerzo.
Y encima se atreven a hacer huelgas y a bloquear carreteras…esta gente merece que les caiga todo el peso de la ley, talvez así se pueda aminorar o solucionar el problema y los potenciales pasajeros puedan viajar tranquilos a través de los hermosos paisajes de nuestro Perú.
11 comentarios:
que salvaje
hasta yo me asuste
salvajes hay siempre
y mas en estos casos
Uff el tema de los choferes y los medios de transporte en Perú son candentes. (en que país del mundo los choferes hacen huelga por que no les dejan hacer lo que quieren... xD)
Mi pobre naranjo lo vive en carne propia, porque suele viajar mucho a provincias por trabajo.
Cada vez que se va de viaje me deja con una ansiedad tamaño industrial.
Y dime Nam, sabías que ahora hay "colectivo" (autos station wagon esos con timón cambiado) que hacen ruta Huancayo-Lima en CUATRO HORAS!!! como para "ponértelos de corbata" jajajajaja.
que horribles episodios, solo puedo decir: que horror de gente. Como para ponerle la piel de gallina a cualquiera :S
La verdad las cosas no han cambiado mucho desde tus aventuras mi querido colega...Yo, como toda persona con esperanza y optimismo, creo que las cosas pueden mejorar, solo basta que todos nosotros nos comprometamos a hacer que la ley se cumpla.
Es un poco fastidioso empezar a reclamarle algo a alguien cuando el resto de pasajeros te mira con cara de "qué le pasa a esta loca" ya que parece que para ellos ya es normal que alguien no respete las reglas del tránsito, manejen borrachos, los cinturones de seguridad sean tiras amarradas para "simular" ante el guardia, etc. Pero tenemos que hacerlo y mientras más seamos, mejor...aquí la gente no sabe para que sirve un cinturón de seguridad...aparte de desidia existe mucha ignorancia y es algo que tenemos que empezar a mejorar poquito a poquito...
Saludos!
S.
pucha que animales !!
de verdad, ellos a veces ni se dan cuenta que tienen vidas bajo su responsabilidad!!
Namito,aprovecho para decirte, que estabas en lo cierto, es una laberintitis :o(
gracias por todo!
Ana Lucia
Bueno, a diferencia tuya, las veces que he viajado siempre lo he hecho tranquilo, aunque decir eso es relativo pues a cualquier movimiento a uno se le pasa la vida por los ojos y eso ya es mejor que ver la pelicula pirata que te ponen en el bus (siempre la misma pelicula).
No termino de entender, pero los choferes creen haber nacido con suerte, supongo que se habran salvado de tantas que nunca se les ocurriría que les pueda suceder algun accidente. Y todos (y digo TODOS) son iguales.
Slaudos.
Y el ministerio de transportes y comunicaciones???...bien gracias.
Eestas son las cosas que hacen que me den ganas de nacionalizarme Boliviana...
Nam, caigo en cuenta que ayer cumpliste años...
Feliz cumpleaños atrasado. Al menos mi saludo a la distancia.
Slaudos.
Estos tipos actuan de esa forma porque no hay autoridad. Pasa lo mismo con las combis, taxis y todo el transporte publico del Perú. Con el cuento de que están trabajando quieren infringir todas las reglas existentes. Ojalá cambie pronto.
Saludos.
un ahojuela para darle a la vida para tener un dia mejor?
por los hongos de mi abuela...
QUE MAESTROOOOOOOOOO
UN ABRAZO EN MAYUSCULAS
La verdad, me decepciona que siempre se generalice y que nuestras mentes estén llenas de prejuicios al punto de soltar comentarios como:
"pucha que animales !! de verdad, ellos a veces ni se dan cuenta que tienen vidas bajo su responsabilidad!!"
Pero... ¿realmente nos hemos puesto en sus zapatos?¿somos choferes como para decir que reclaman con injusta razón? Yo pensaba lo mismo que ustedes, hasta que hace algunos días por motivos de la carrera de periodismo tuve que entrevistar a varios choferes interprovinciales del Perú (tanto de empresas formales como informales). Algunos señores muy groseros pero otros sumamente cultos y amables. No podemos darle esa imagen a los choferes pues de lleno no sabemos lo que viven. De hecho, una de las conclusiones (para sorpresa mía) de mi informe fue que gran parte de los accidentes en carretera se dan porque un automovil adenlantó o quizo pasar al bus interprovincial y ESE CHOFER se ve el la necesidad de hacer hasta lo imposible para evitar accidentes. No pretende culpar o defender a nadie, pero la proxima vez, tal vez debamos empaparnos un poco más en el tema y conocer a ese individuo ya no como chofer si no como PERSONA con responsabilidades y necesidades.
un abrazo-bel
http://bajoelcielovioleta.blogspot.com/
Publicar un comentario