¿Has despertado con el alba saludándote en la ventana, diciéndote que hay retos que te esperan, que es momento de continuar y que está bien que lo hagas?
¿Has podido alguna vez respirar tan hondo que has sentido como cada uno de tus temores, debilidades, y miedos van desapareciendo hasta no ser mas que una sombra, tenue, vaga, que no opaca la sensación de libertad y frescura que te da ese momento?
¿Has oído la caída incesante de la lluvia, el sonido del trueno, y visto el cielo gris nublado que te enfrenta para saber de que estás hecho?
¿Has visto al sol ponerse en el mar, diciéndote adiós, mientras la brisa del océano pasa a través de tu alma, limpiando tu cansancio y tu dolor?
¿Has caminado en una noche sin luna, sin estrellas, sin más compañero que los latidos de tu corazón, y llegado a destino por el simple deseo de seguir caminando?
¿Has comprendido que todo lo que te ha pasado no es sino parte de tu propia historia, y que gracias a ella te has convertido en la persona que eres?
¿Te has dado cuenta?
2 comentarios:
Muchas de esas cosas las he sentido, he entendido, tal como dices, que no nací siendo yo, sino que nací con la esperanza de ser lo que soy, y me alegro de estar lográndolo.
Si.
Aunque no habia pensado en eso
desde hace mucho.
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